Cartagena de Indias tiene muchos hoteles espectaculares con jardines coloniales llenos de palmeras y plantas tropicales donde poder ir a cenar.

También hay hoteles con azoteas con vistas preciosas para tomar una copa.

Así que si vas a Cartagena de Indias te recomiendo que veas todos los sitios bonitos que hay y que organices una noche estupenda.

Nuestro primer plan era tomarnos una copa en la azotea de un hotel muy chulo en Getsemaní, cerca de nuestra casa.

Y después cenar en el hotel Santa Clara.

Pero después de un día de mucho, mucho calor y humedad en los que vimos el castillo de San Felipe y el casco antiguo de Cartagena, empezó a llover.

Donde Fidel

Así que fuimos improvisando, primero fuimos a Donde Fidel, un clasicazo de Cartagena de Indias famoso por su salsa.

Ponen cerveza y copas y está cubierto, así que estaba muy bien para protegerse de la lluvia.

Donde Fidel está en los soportales de chuches de los que hablaba en el post sobre la Ciudad Amurallada.

Tiene una terraza estupenda con sillas de director de cine amarillas, pero como fuimos cuando empezaba a llover la terraza estaba vacía.

Así que entramos en el interior y nos tomamos un par de cervezas.

El bar por dentro no es bonito, es el típico bar con sabor, pero no es especialmente bonito, pero genial para los amantes de la salsa.

Creo que es un bar estupendo para ir animado después de cenar, pero fuimos demasiado pronto, no había demasiado ambiente de salsa.

Después de la cerveza, nos dimos un paseo muy bonito por Cartagena de noche, mientras chispeaba, cogimos un taxi y nos fuimos al hotel Santa Clara.

Llegando al hotel Santa Clara

Cuando salimos del taxi en la plaza donde está el hotel Santa Clara vimos una entrada de hotel preciosa pintaba en color albero.

En la plaza hay terrazas y está todo animadísimo, el taxista nos dijo que esa plaza es un sitio estupendo para tomar unas copas.

En la puerta del hotel había dos señores vestidos de blanco de arriba abajo con sombreros de copa también blancos.

En la mano tenían paraguas negros enormes para ayudar a los clientes a salir de los taxis y que entraran en el hotel sin mojarse.

La entrada al hotel es espectacular, toda la parte central es un patio colonial lleno de soportales y plantas tropicales.

Está muy bien iluminado.

Para ir al restaurante hay que recorrer todo el patio, nosotros dimos un paseo alrededor de los soportales para verlo mejor.

Por este patio han paseado Fidel Castro, Yasser Arafat y el Príncipe Hussein de Jordania, que fueron de los primeros clientes del hotel.

El restaurante 1621

El restaurante se llama 1621.

El restaurante es precioso, está perfectamente decorado, nos quedamos encantados por el sitio tan espectacular en el que íbamos a cenar.

Nos sentamos a la mesa, pedimos una botella de vino blanco,  luego pediríamos otra, y pedimos cada uno un plato.

No teníamos nada de hambre, porque habíamos comido la posta negra que nos habían preparado en casa con las patatas a la crema.

Y estaba tan rico, que nos habíamos puesto morados.

Pero en el restaurante nos pusieron una crema pequeña de aperitivo que estaba buenísima y eso ya nos abrió el apetito.

Pedimos cada uno un plato y estaba todo delicioso.

La carta del restaurante es cocina francesa con algunos  ingredientes criollos.

Yo pedí un róbalo a la provenzal con hinojo braseado y salsa beurre blanc, que aunque en la carta no me pareció especialmente atractivo, luego estaba buenísimo.

Luego pedimos unos postres para compartir.

Cenamos de maravilla, en un lugar precioso y con una atención buenísima.

Una cosa que me encantó del restaurante aparte de la decoración y la comida fue la tranquilidad con la que cenamos.

No había ni un ruido, ni una voz más alta que otra, cenamos tranquilos sin tener que levantar la voz. Una maravilla.

Le daría clarísimamente un diez al restaurante en todo.

Salimos por menos de 30€ por cabeza.

Historia del edificio

El hotel Santa Clara fue un antiguo convento de las hermanas clarisas que se fundó en 1.621, por eso el nombre del restaurante, después de muchos donativos.

El portalón por donde se entra al hotel, estaba siempre cerrado en sus tiempos de convento, y apenas entraban visitas.

Está a pocos metros del mar abierto, por lo que ha sufrido la fuerza de las olas.

En el siglo XIX expropian el convento y a las clarisas las envían a La Habana.

Después de esto el edificio quedó vacío y luego se utilizó comoalbergue, después como hospital, luego como aulas de la universidad de Medicina, talleres de la Escuela de Bellas Artes.

Pero el edificio, mientras tanto, se destrozaba por falta de cuidados.

Hasta que un grupo de arquitectos deciden compralo, arreglarlo y convertirlo en un hotel de lujo.

Una cosa genial que han hecho los arquitectos es que han mantenido las utilidades de los espacios.

Es decir, han hecho el restaurante en el refectorio, el auditorio en la nave del templo, las habitaciones en las celdas, la recepción en la portería y las cabinas telefónicas en los confesionarios.

Por eso el restaurante 1621, donde comes, está en el mismo lugar donde las monjas comían.

Todos los datos de la historia del edificio los he tomado de el periódico colombiano El Tiempo.

Restaurante 1621
Hotel Santa Clara
Calle del Torno 39-29
BARRIO SAN DIEGO – BOLIVAR
Cartagena de Inias
COLOMBIA
(+57) 5 6504700